-->

domingo, febrero 17

En busca del deseo




Sabía perfectamente hasta donde llegar, donde poner un punto final a aquella historia. Pero no quería. Era una mujer adulta.

Hace años se había separado del único hombre al que había amado, el hombre con el que compartía la cama pero con el que era incapaz de expresar su deseo a pesar de sentirlo. Desde entonces se había envuelto en una sórdida obsesión, perseguir a un hombre 15 años mas joven que ella, al que deseaba con locura. Era una adoración hacía él, incluso hacía la humillación que él practicaba con ella.

Se pasaba dias enteros esperando que él subiese a su piso diez minutos tan solo para besarla, para de nuevo darle falsas promesas de una vida que el no tenía y ella soñaba. En el mejor de los casos hacían el amor de forma compulsiva, el deseo brotaba de una alocada sensación de rencor, frustración..... de querer arrancar de aquel joven cuerpo cuanto le habia prometido una y otra vez.

Con el tiempo consiguió que pasase mas de una tarde a su lado. Comenzó a guiarle y enseñarle, le decía como provocar deseo en la mujer que amaba, como recorrer su cuerpo con suavidad, a no buscarlo de inmediato, como si buscase sus labios con la ternura de un primer beso hasta finalizar haciéndolo con intensidad. A comprender que sus pechos no deseaban mas que ternura... ni rudeza ni fuertes mordiscos. A recorrer su espalda con la yema de sus dedos hasta que se arquease para entonces rozar sus nalgas con el vello de su pecho. A erizar su piel para luego sofocarla con la humedad de su lengua. A como debía de humedecerla y excitarla... A jugar con su deseo dentro de ella para converirtirlo en el juego de ambos, no solo una vulgar penetración

Pero poco a poco descubrió que ni amor existía, ni tan siquiera el de ella. Se preguntaba una y otra vez que le había llevado a aquella locura, cual era la razón de adorar así a alguien sin tan siquiera amarlo, si aquella busqueda no era otra que la de ella misma, la de buscar fuera de si misma lo que ella no alcanzaba a ser y deseaba

La casualidad le había reencontrado con su ex, bueno, la llamada de una amiga invitándola a una cena el sábado por la noche y por la que sintió intriga... Él estaba allí, con muchas mas canas, junto a la mujer con la que había reecho su vida, 8 años menor que él... En sus ojos y en sus gestos se veía la felicidad y complicidad con aquella bella mujer. La curiosidad incial le llevo a darse cuenta que amaba a aquel hombre incluso mas de lo que pudo sentir hasta que lo dejó.

Había desecho su vida humillada por un joven y alejada del amor, presa del silencio de una cama que vomitaba soledad cada vez que la rozaba. Aquel joven construyó su propia fantasia, la utilizó para madurar.. y cuando alcanzó su fín ni tan siquiera fué capaz de decirle que la dejaba. Las mentiras, el tiempo y la paulatina distancia fueron el final de aquella historia. Él nunca había dejado a su novia, a la que amaba y con la que el sexo se había convertido en una intensa expresión del deseo que aquella mujer le había enseñado.

Curiosamente él aprendió del error de ella, no deshizo su vida en busca de lo que no conocía. Él envejecería junto a la mujer que amaba y ella lo haría sola, despertándose a media noche para echarlo de menos y para de nuevo dormirse pensando ... "cabrón"

Nota.- Si tenéis curiosidad por la historia de este post, lo he escrito a partir de la historia ¿fantasia o realidad? que una mujer cuenta en su blog ...
A mi me ha engachado.

No hay comentarios: